Urge una alianza productiva y trabajar en equipo, el mensaje del sector productivo al presidente Arce Catacora

“No nos vamos a rendir ante la crisis”. Ese fue el mensaje lanzado por los sectores aglutinados en la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), desde donde urgen una alianza productiva entre el sector público y privado en el que se impulsen “condiciones adecuadas urgentes” para mejorar la productividad del campo. El tema fue remitido directamente al jefe de Estado, Luis Arce Catacora.

Así lo expuso el presidente de la CAO, José Luis Farah, al referir que existen las potencialidades para aumentar la producción de alimentos, garantizar el abastecimiento del mercado interno y generar mayores excedentes para las exportaciones, lo que conllevaría a mayores ingresos de divisas para el país.

“Señor presidente del Estado, los productores agropecuarios le proponemos una alianza productiva, porque urge que trabajemos en equipo, poniendo nuestros mejores esfuerzos orientados a lograr mejores condiciones de vida para las familias bolivianas”, apuntó Farah en una conferencia de prensa que estuvo encabezada por la dirigencia sectorial.

Farah expuso que los productores están comprometidos con dar seguridad alimentaria a los bolivianos, pese a que se lidia con condiciones climáticas adversas, la proliferación del contrabando, los conflictos políticos – sociales y la fluctuación de precios de los insumos a escala global.

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La CAO considera que estos factores se pueden mitigar con acceso a la tecnología y apoyo normativo a través de políticas públicas del Estado, motivo por el cual se dirigieron al presidente Arce Catacora.

En este sentido, Farah esquematizó cinco temas urgentes relacionados a la “falta de condiciones” para aumentar la producción de alimentos:

1) Restricciones al acceso de combustible, con normas burocráticas que inviabilizan el oportuno abastecimiento para el desarrollo de las actividades productivas.

2) El freno a la vacunación contra la Fiebre Aftosa, sin coordinar estrategias y mecanismos con los ganaderos, siendo que la normativa así lo prevé y los productores son los que pagan las vacunas en resguardo de la seguridad alimentaria, además de poner en riesgo el hato ganadero, la pérdida de mercados externos y las divisas que generan las exportaciones de carne y leche.

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3) La inseguridad en la tenencia de la tierra productiva por los avasallamientos sigue impune, a pesar del compromiso del Presidente del Estado de no permitir estos actos ilícitos

4) La competencia en desigualdad de condiciones con productos transgénicos que ingresan al mercado interno procedentes de países vecinos que utilizan esta tecnología con mayores niveles de productividad y a los productores bolivianos no se les permite acceder responsablemente a esta herramienta tecnológica.

5) El constante encarecimiento de los insumos y otros bienes importados por la falta de dólares en el sistema financiero que aumenta los costos de producción, poniendo en riesgo la continuidad de la actividad productiva, según el reporte.

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