Caen 23% las exportaciones en el tercer trimestre de 2023 y marcan un déficit de $us 79 millones, según el IBCE

De forma contraria. Las exportaciones cayeron 23% en valor, lo que representa un déficit de $us 79 millones, según el gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez.

“El comercio exterior boliviano, de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística, no está teniendo, lamentablemente, el mejor desempeño que hubiéramos querido para la presente gestión”, señaló el ejecutivo.

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Rodríguez puso en mesa el notable desempeño de las exportaciones en 2022, un escenario que no se repite este año según los datos del flujo de comercio hasta septiembre.

“En 2022 marcamos un hito histórico con más de 13.500 millones de dólares de exportación. Este año, lamentablemente, hasta el mes de septiembre, tenemos una caída de las exportaciones en un 23% en valor y un 9% en volumen, mientras que las importaciones han crecido un 1% en volumen aunque hayan caído 3% en valor”, afirmó.

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Según Rodríguez, hasta septiembre los índices del comercio exterior boliviano dan cuenta de un déficit de 79 millones de dólares, “un monto pequeño” si se compara “con la dimensión que tiene la economía del país por más de 44.000 millones de dólares”.

Comparación

Sin embargo, entre enero y septiembre de 2022, “teníamos más de 2.000 millones de dólares de superávit, mientras que hoy tenemos un déficit de 79 millones de dólares”.

“Si queremos normalizar la cantidad de la divisa estadounidense en el sistema financiero, en el mercado, lo que tenemos que hacer es exportar más y poner nuestra atención, nuestras políticas públicas, en desarrollar las exportaciones que pueden crecer a muy cortísimo plazo con mayor facilidad” con sectores como el agropecuario, la agroindustrial y el forestal maderero, apuntó Rodríguez.

Este plan también sirve para “sustituir competitivamente importaciones para ahorrar divisas, para evitar que los dólares se vayan del país”, añadió.

“Un buen ejemplo de esto, de que se puede dar un trabajo sinérgico público-privado, es el nuevo contrato por tres años que han logrado el sector cañero-sucroalcoholero en Santa Cruz con el Gobierno para seguir produciendo un combustible ecológico, un combustible verde, un aditivo vegetal como es el etanol, hoy día a base de la caña de azúcar que seguramente en breve será a base del sorgo, del maíz u otras materias primas”, señaló Rodríguez.

En criterio del gerente del IBCE, este “gran efecto multiplicador para la economía” se da “con una visión público-privada compartida, con un objetivo común y el sector privado arriesgando, invirtiendo en este país, por este país, para este país y por otra parte el Gobierno dando las condiciones para ello, nos está permitiendo tener una diversificación de la matriz energética”.

El etanol no solo mejora el octanaje de la gasolina que se comercia en el país, también a través de procesos de inversión se generan empleos y más ingresos por concepto de impuestos para el Estado, se ahorran divisas y se mejoran los ingresos de las familias, argumentó el ejecutivo.

“Para que el comercio exterior boliviano funcione, no necesitamos cupos de exportación, necesitamos promoción público-privada, ganancia, apertura de mercados, sustitución de importaciones en base a un esfuerzo compartido público-privado”, señaló Rodríguez.

“Felicitamos este reciente contrato que se ha nuevamente logrado por los próximos tres años porque con eso gana el sector cañero-sucroalcoholero, gana el Gobierno, gana el país, ganamos todos”, sostuvo.