Antes de pensar en un aumento salarial se debe cuidar el mercado laboral, dicen analistas

Mantener la estabilidad de los trabajadores y las empresas que crean fuentes de trabajo debe ser la prioridad en estos momentos, señalan los expertos

Publicado: 10/03/2023 05:10
[Foto referencial] / Actualmente, el salario mínimo es de Bs 2.250

Después de que la dirigencia de la Central Obrera Boliviana (COB) pidiera al Gobierno de Luis Arce Catacora un incremento salarial del 10% tanto para el mínimo nacional como para el haber básico, analistas advierten que la coyuntura económica del país es complicada para que la actual administración estatal maneje estas expectativas y la viabilidad de un aumento de salarios, donde el sector privado también juega un papel fundamental.

Es por ello que los especialistas consultados por UNITEL señalan que se debe evitar que el mercado laboral se ponga en riesgo.

“No es momento para pedirles a las empresas que puedan aumentar salarios, es verdad que las personas y la familias requieren más recursos porque su ingreso se ha deteriorado, pero lamentablemente en este momento es muy complicado y más allá se debe pedir al Gobierno cambios estructurales en la economía”, apunta el analista económico Joshua Bellott.

El analista considera que son tiempos en los que el Gobierno debe apuntar a beneficiar a la población, dejando de pensar en los grupos afines que ayudan a sostener el poder, en referencia a las organizaciones sociales partidarias.

MIRA AQUÍ: La COB plantea un aumento del 10% al salario mínimo nacional y al básico

“Si este enfoque cambia y el Gobierno se preocupa por bajar ese gasto excesivo que tiene va a dar más campo para que la gente y las familias puedan generar negocios y empleos que tengan como consecuencia un crecimiento sostenible que es algo no visto en el país debido a que aún existe dependencia de rentas petroleras y de materias primas en general”, acota el especialista.

Sobre la propuesta de la COB, el presidente Arce Catacora este asunto será sometido a análisis y así lo dejó entrever en sus redes sociales: “Como cada año, evaluaremos siempre pensando en nuestra clase trabajadora y el bienestar de la economía nacional”.

Al respecto, el economista José Gabriel Espinoza advirtió que abordar este tema puede ser una jugada para desviar la atención de otros temas económicos y la discusión sobre el salario fue abierta con demasiada antelación por lo que puede ser un problema serio para las expectativas de las personas.

MIRA AQUÍ: Bonos soberanos de Bolivia caen a su nivel más bajo tras desplome de reservas en dólares

Y es que hoy en día, de acuerdo con la lectura de Espinoza, el ciudadano y el empleador están preocupado por el tipo de cambio, la disponibilidad de dólares y la sostenibilidad del subsidio, por lo que al agregar la preocupación del costo salarial es otra problemática, ya que esto no es un tema que sea responsabilidad de las grandes empresas, sino de empresas familiares y pequeñas que están peleando para evitar la crisis.

Bellott también apuntó que el país está en una coyuntura delicada y es importante que la ciudadanía lo reconozca y sobre las autoridades, que en los últimos meses “nos han dicho que todo anda muy bien. Y no solo por lo que pasa ahora con la percepción de las familias, ya que existe una desaceleración económica que data desde 2014 en donde los precios han subido lentamente.

Si bien el propio Arce Catacora señaló a principios de marzo de 2023 alega un control de la inflación -en febrero el indicador fue de -0,44% y la acumulada al primer bimestre de -0.11%-, Bellott expone que la subida de precios de insumos y bienes intermedios ha deteriorado el ingreso en general de las familias bolivianas, el comportamiento y procesos productivos de las empresas.

“Si el Gobierno dice que la inflación es negativa estaría aceptando la recesión en el país porque los precios bajan y las familias tienen en extremo deteriorado su ingreso, es un mal indicador. Las reivindicaciones salariales son importantes, pero más allá del debate del porcentaje, el problema es que estamos en un momento muy delicado y al borde de un colapso de la economía”, advierte Bellott.

Espinoza coindice al señalar que cualquier empleado necesita un incremento, pero también cualquier empleador está en una situación compleja a pesar de las cifras de inflación que maneja el Gobierno -proyecta una tasa de inflación de fin de periodo de 3,28%-

“El problema es que no logramos generar la producción suficiente para ser competitivos en el mercado internacional y generar más ingreso. Hay que revisar cómo bajar el costo laboral al empleador para mantener o subir el ingreso del trabajador sin afectar a los equilibrios de la empresa y de la economía en general, pero es una discusión que el Gobierno no quiere tener porque implica una revisión de la normativa y una pérdida de control recursos”, sentencia Espinoza.

MIRA AQUÍ: Déficit fiscal, una de los detonantes de la caída de las Reservas Internacionales, según analista

Tags