“No hubo fraude”, dicen exvocales electorales en acto de desagravio organizado por el Gobierno

El Ministerio de Justicia realizó este lunes un acto de desagravio a favor de los exvocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y de los nueve Tribunales Electorales Departamentales (TED) que fueron acusados de fraude electoral tras la realización de las elecciones generales de 2019.

En el evento se denunció que las exautoridades electorales sufrieron vulneración de sus derechos cuando fueron acusados de las irregularidades y luego procesados por la justicia.

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La expresidenta del Tribunal Supremo Electoral, María Eugenia Choque, a nombre de sus excolegas dijo que pueden hablar luego de “tres años de silencio” y aseguró que fueron acusados injustamente por un delito que nunca cometieron.

“Nunca hubo fraude, ese informe preliminar sin firma (de la OEA) fue el causante de tanto sufrimiento y dolor”, dijo Choque.

Choque denunció que fueron víctimas de ataques racistas desde que comenzaron a hacer su trabajo como vocales y a pesar de ello llevaron adelante el trabajo de las elecciones generales de 2019, lo que luego provocaría una persecución en su contra cuyas consecuencias siguen sufriendo, ya que pese a que no existen procesos penales no han podido recuperar sus vidas.

En el acto participaron el viceministro de Justicia, Hernando Siles y el embajador boliviano ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Héctor Arce, que tomó palabra a nombre del Gobierno y al igual que Choque culpó al informe preliminar de la OEA de haber sido el causante de la crisis política en Bolivia y de la posterior renuncia de Evo Morales a la Presidencia.

Arce dijo que la OEA publicó un informe ilegal “que contenía falsedades” y que no estaba en el convenio que habían firmado el organismo y el Gobierno de Evo Morales.

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“En base a ese informe falso y a esa acción política de un secretario general que no honra a la OEA, en unas horas se vino abajo la institucionalidad, la Policía y las FFAA pidieron la renuncia del presidente Evo Morales y estaban siendo detenidos los vocales del TSE”, señaló.

“Este es un acto de desagravio por este hecho, esa verdad se ha impuesto, en Bolivia jamás hubo un fraude electoral”, agregó Arce en coincidencia con la expresidenta del TSE.

Lo que decía el informe de la OEA

El informe de la OEA citado por Choque y Arce, publicado la madrugada del 10 de noviembre de 2019, señalaba, entre otras cosas que: se había hallado una “manipulación dolosa” y “parcialidad de la autoridad electoral”, alterando de esta manera “la voluntad expresada en las urnas” durante las elecciones generales de ese año.

Entre las “acciones deliberadas que buscaron manipular el resultado de la elección”, el documento menciona la “paralización intencional y arbitraria, sin fundamentos técnicos, del Sistema de Transmisión de Resultados Preliminares (TREP)”, conocido como conteo rápido.}

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El informe detalla que el equipo auditor detectó “una manipulación dolosa de los comicios en dos planos”: a nivel de las actas, a partir de su alteración y la falsificación de las firmas de los jurados de mesas, y de los resultados, a raíz del redireccionamiento del flujo de datos a dos servidores ocultos.

Ethical Hacking, una consultora de ciberseguridad contratada por el TSE para auditar la elección, también encontró vulnerabilidades, incluidas aquellas que hacían posible la interceptación y alteración del código fuente, de registros, de votos y de fotografías en el sistema electoral; la interceptación y lectura del TREP y sus comunicaciones.

Participación de la CIDH

Por su parte, Joel Hernández, agradeció la invitación a formar parte de este acto y dijo que participa de forma paralela a la visita que realiza la comisión de la CIDH esta semana para verificar la situación de los derechos humanos en Bolivia.

Hernández recordó que la situación de los exvocales fue abordada por el trabajo realizado por el GIEI que escuchó durante su investigación los testimonios de las exautoridades, sobre todo las referidas a las irregularidades durante los procesos judiciales en su contra y cómo sufren hasta la fecha problemas para rehacer su vida.

Hernández dijo que lo sucedido en el caso de los exvocales prueba la fragilidad del sistema judicial boliviano ya que en varios casos las autoridades sufrieron de manera injusta procesos que no fueron ejecutados legalmente.

“Ojalá esto pueda servir para que den vuelta la página y puedan recuperar su vida”, señaló el relator, que en ningún momento se refirió al informe preliminar de la OEA que fue señalado como “falso” por las autoridades bolivianas y los exvocales.