“Una voz me ordenó que lo mate”: la terrible confesión del joven que asesinó a su padre
Con una puñalada en el corazón y golpes con martillo, el hombre fue asesinado por su hijo que estuvo internado en un centro psiquiátrico.
El pasado 6 de enero, en la ciudad de Los Polvorines (Argentina), ocurrió una tragedia cuando un hombre identificado como Eduardo Iocca fue asesinado a sangre fría. Diego Iocca, un joven de 27 años, es acusado de matar a su propio padre con una puñalada en el corazón y golpes.
Según la reconstrucción de los hechos, el joven comenzó a discutir con su padre por dinero y luego lo atacó hasta que el hombre se encerró en su habitación para evitar las agresiones de su hijo. Sin embargo, la esposa de Eduardo y madre de Diego llegó de trabajo y encontró a Eduardo sin vida.
La Policía llegó al lugar y pilló al sindicado recién bañado, pero con residuos de sangre en una de sus orejas. Además, encontraron varias prendas ensangrentadas que estaban dentro de una bolsa por lo que fue aprehendido de inmediato.
En una primera instancia, el joven negó el crimen y dijo que fueron “víctimas de un robo y que Eduardo había sido asesinado por un ladrón”.
Confesó el crimen
Días después se conoció que el joven confesó el parricidio y alegó que “una voz le ordenó matarlo”, según señala el medio argentino La Nación.
En su confesión ante el fiscal, el sindicado afirmó que “remató” a su padre con un martillo, herramienta que fue secuestrada en la escena del crimen.
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Diego Iocca estuvo internado en un centro de salud mental y salía los fines de semana para visitar a su familia. Ante esto, se le realiza una evaluación psiquiátrica antes de la audiencia en la que es imputado por el delito de homicidio agravado.