Las claves para entender el conflicto por la carretera Santa Cruz- Las Cruces- Buena Vista
El bloqueo de caminos, que entró en cuarto intermedio tras 11 días, generó pérdidas millonarias, si no se llega a un acuerdo la medida se reactivará a mediados de septiembre. Esto es lo que hay que saber
Este jueves, luego de 11 días, se decidió entrar en un cuarto intermedio en el bloqueo que exige la construcción de la carretera Santa Cruz- Las Cruces- Buena Vista. Los pobladores anunciaron que de no encontrar una solución a sus demandas se retomará la medida el 11 de septiembre.
Aquí explicamos las claves para entender este conflicto:
El proyecto carretero
El origen del conflicto es la ejecución de uno de los proyectos más importantes de la Red Vial Departamental de Santa Cruz: la construcción y pavimentación de la carretera Santa Cruz- Las Cruces- Buena Vista.
Este proyecto vial tiene como objetivo descongestionar el norte cruceño, se calcula que una vez construida la vía ahorrará a los conductores más de dos horas y 70 kilómetros de viaje, evitando la necesidad de entrar a las ciudades de Montero, Warnes, y Santa Cruz para viajar desde La Guardia y municipios aledaños.
Además de mejorar la conectividad terrestre, esta carretera permitirá aumentar actividades agrícolas y comerciales al formar parte del área de influencia del principal corredor de exportaciones nacionales e internacionales de Bolivia.
Guendá Urubó y el riesgo ambiental
La Gobernación de Santa Cruz, desde la gestión de Rubén Costas y la actual de Luis Fernando Camacho, ha destacado la importancia del proyecto carretero por el impacto social y económico favorable que tendrá para el departamento, pero siempre bajo la consideración de que su ejecución no ponga en riesgo el medioambiente, específicamente los acuíferos que se encuentran en la zona.
El agua que se consume en Santa Cruz es subterránea y según ha explicado la Gobernación cruceña se recarga especialmente en tres zonas: en las playas del río Piraí, en las lomas de arena y en la Unidad de Conservación del Patrimonio Natural Guendá Urubó, es esta tercera fuente de agua la que está en riesgo con el proyecto carretero.
La recarga de agua que tiene su origen en Guendá Urubó supone el abastecimiento de más de 331 millones de litros de agua que se consumen en la región metropolitana de Santa Cruz a diario, una zona donde habitan cientos de miles de personas.
Según señala la Sociedad de Ingenieros de Bolivia, el proyecto carretero original, que fue aprobado por la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) cruza por Guendá Urubó, afectando de manera directa a todas las áreas de recarga de aguas que están en el lugar y que desaparecerían si se ejecuta la obra, poniendo en riesgo el abastecimiento del 60% del agua que llega al área metropolitana de Santa Cruz.
El vicegobernador cruceño Mario Aguilera explica que estudios científicos nacionales e internacionales desarrollados a lo largo de décadas han demostrado que la calidad de este suelo es especial. En Guendá Urubó el agua se infiltra a mayor velocidad que en otras zonas.
“Dicho de otra manera, si llueve hoy sobre la UCPN (Unidad de Conservación del Patrimonio Natural Guendá Urubó), el agua se recargará en menor tiempo para volver a ser explotada. Por la misma razón, por su calidad de infiltración, esta zona también es muy sencilla a sufrir contaminación”, advierte Aguilera sobre el riesgo de realizar una obra carretera en el lugar.
Además, esta zona está protegida por ley departamental. En 2021 se aprobó la ley que resguarda el área bajo la denominación de “Paisaje Protegido Departamental Guendá-Urubó” y establece los requisitos específicos para la ejecución de obras en el lugar, prohibiendo expresamente cualquier construcción que ponga en riesgo el ecosistema y biodiversidad.
El proyecto origonal y las alternativas
La Gobernación de Santa Cruz ha ofrecido hasta cinco alternativas para que la carretera se construya sin que se afecte a los acuíferos. En todos los casos solo se afecta al tramo dos, de tres que tiene la carretera, y es el que pasa por el área protegida donde se encuentran los acuíferos.
El proyecto original tiene un trazo de 80.4 kilómetros distribuidos en tres tramos:
Tramo 1: Santa Cruz- Las Cruces- Terebinto con una longitud de 25 km
Tramo 2: Terebinto- Santa Fe- con una longitud de 22 Km
Tramo 3: Santa Fe- Buena Vista con una longitud de 33.4 Km
La propuesta de la Gobernación es hacer un cambio en el tramo 2 de manera que no se afecte la zona de descarga de agua, aumentando la longitud de la carretera hasta en 95.5 Km, es decir 16.7 Km más que el proyecto original.
Lo que dice la ABC
La Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) ni el Ministerio de Obras Públicas aceptan cambios en el proyecto original. Señalan que el trazo para la construcción de la carretera Buena Vista-Las Cruces, en Santa Cruz fue elaborado y solicitado por la Gobernación de Santa Cruz en 2010, durante la gestión de Rubén Costas.
También señalan que el estudio justificativo para la creación de la UCPN Güendá – Urubó (y que sirvió para la Ley 208) ya contempló la construcción carretera y que “en ningún lugar del justificativo dice que va a afectar a los acuíferos”.
La ABC además recuerda que Luis Fernando Camacho, como gobernador de Santa Cruz, firmó el 22 de abril de 2022 un convenio intergubernativo en el que aceptan la realización del proyecto tal cual estaba definido desde un principio.
Mientras que, el ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño asegura que la ruta del proyecto carretero no es nueva y que antes no habían existido cuestionamientos. “El proyecto ya cuenta con licencia ambiental, entonces es falso que la carretera daña los acuíferos”, asegura la autoridad.
Lo que se viene
Este jueves, tras el clamor de los sectores perjudicados por el bloqueo, la dirigencia decidió poner pausa a la protesta, pero advirtiendo que de no hallar una salida al conflicto se retomaría la medida.
El comité de movilizaciones de Buena Vista informó que se firmó un acuerdo que establece que las mesas técnicas continúen con su trabajo de análisis y evaluación sobre el proyecto carretero que ya cuenta con un financiamiento económico de $us 112 millones dado por la CAF- Banco de Desarrollo de América Latina.