YPFB guarda silencio por el cerco a la refinería, pero alista un proceso por “actos vandálicos” por intento de desbloqueo

La empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) presentó una denuncia penal en contra de personas que protagonizaron “actos vandálicos” en cercanías de la Planta de Almacenaje de Palmasola y la Refinería Guillermo Elder Bell, hechos registrados durante el fin de semana. Sin embargo, se niega a responder por el cerco que impulsan grupos que están en contra del paro y que bloquean la salida de cisternas a los surtidores.

El propio abogado penalista de la estatal petrolera, Freddy Colque, evitó responder a las consulta de UNITEL sobre los motivos que frenan la salida de cisternas, tema que tiene en vilo a diferentes sectores y que también va contra la Ley y estipula reclusión en una cárcel como sanción.

¿Qué establece la Ley?

La Ley 3058 de Hidrocarburos establece que las actividades de transporte, refinación, almacenaje, comercialización, la distribución de gas natural por redes, el suministro y distribución de los productos refinados de petróleo o y de plantas de proceso en el mercado interno, son servicios públicos, que deben ser prestados de manera regular y continua para satisfacer las necesidades energéticas de la población y de la industria.

Asimismo, la Ley de Desarrollo Sostenible del Sector de Hidrocarburos señala que, con carácter prioritario, se debe garantizar la atención del mercado interno de manera permanente e ininterrumpida, considerando el consumo doméstico, comercial e industrial y el transporte.

“Toda persona que promueva la interrupción de las actividades a que se refiere la Ley de Hidrocarburos, será sancionada conforme a lo establecido en el Artículo 214 del Código Penal (seis años de privación de libertad)”, expresa la norma vigente.

La acción de los grupos antiparo

Los grupos que rechazan el paro impiden que las cisternas salgan de la planta de almacenaje argumentando que “si los pobres no trabajan, los ricos tampoco” y han tenido cercanía con el ministro de Obras Públicas en los últimos días para pedir resguardo policial a sus manifestación, tema que cuenta con el visto bueno de la autoridad.

Este lunes se protagonizaron marchas con arengas en contra del paro y de autoridades como el gobernador cruceño Luis Fernando Camacho y el líder cívico Rómulo Calvo, pero sin dar vía libre a las cisternas que abastecen al sector privado y en las provincias, tema que fue denunciado por los propios transportistas el pasado 24 de octubre, es decir, antes de los “actos vandálicos” que ahora son denunciados por el firma petrolera.

A esto se suma el cerco que los miembros de la Federación Sindical Única de Trabajadores campesinos de Santa Cruz, parte del Bloque Oriente del masismo, impulsan en los cuatro puntos cardinales y principales vías que conectan a la capital cruceña con su provincias, otros departamentos y el exterior.

El descargo de YPFB

“Hemos interpuesto una denuncia como efecto del conflicto suscitado en inmediaciones de la refinería de YPFB entre grupos de bloqueadores y motociclistas, quienes llegaron el sábado con petardos y podían haber generado un grave daño no solo a YPFB, sino que se puso en riesgo vidas humanas”, manifestó el asesor legal de la empresa.

La denuncia se centra en un vecino de nombre José Eduardo S.G. y otros por el delito de atentado contra bienes públicos del Estado y otros. Para respaldar esto, YPFB sí acude al Código Penal, aduciendo que el delito está tipificado en el artículo 141.

“Resguardando los intereses de nuestra empresa y de la seguridad de las personas que viven en inmediaciones a la refinería, nos hemos apersonado a la Unidad de Crimen Organizado dependiente de la FELCC y hemos interpuesto una denuncia formal en contra de este ciudadano, quien es el primer identificado. En el desarrollo de la investigación, también se irán identificando a otros responsables”, añadió el abogado penalista de YPFB.

Según la información que maneja YPFB, el sindicado se encontraba en un grupo de motoqueros, portaba petardos que hizo estallar cerca de cisternas que estaban varados en inmediaciones de la refinería en fecha 29 de octubre de 2022.

Falta combustible en los surtidores

El hecho de que falta combustible en los surtidores es el tema de conversación entre los conductores y basta con acudir a alguna estación de servicio en la ciudad para dar cuenta de la falta de abastecimiento. No obstante, YPFB sí cuenta con los carburantes en la estaciones de servicio que son de su propiedad, en donde se forman largas filas.

Tanto así que la empresa petrolera anunció el despacho de 38 camiones cisterna la madrugada de este lunes con destino a estaciones de servicio de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra y provincias del departamento, según su máximo ejecutivo Armin Dorgathen Tapia.

Sin embargo, desde la oficina regional de la Asociación de Surtidores de Bolivia (Asosur) señalaron que más de 36 estaciones de servicio de la ciudad y provincias pudieron retirar sus cisternas para abastecimiento, pero solo se alcanzó el 50% de cobertura en la capital cruceña, por lo que no todos tienen combustible para surtir a la población y al sector privado.

Deponer actitudes

Dorgathen pidió a los sectores movilizados deponer actitudes a fin de evitar mayores complicaciones en el abastecimiento de combustibles líquidos y GLP en el departamento de Santa Cruz. “Pedimos deponer actitudes. Se está tornando caótico para nosotros, para la producción de combustibles”, advirtió Dorgathen.

Asimismo, la autoridad lamentó la actitud de algunos miembros del servicio de transporte privado de camiones cisterna que no quisieron salir con combustibles líquidos desde el complejo de YPFB.

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“Ayer tenían que haber salido 12 cisternas a provincias y no quisieron salir a pesar de haber una caravana de convoy con resguardo policial. Hacemos un llamado a las estaciones de servicio en provincias que cumplan cuando se les diga que salgan y que salgan cuando nosotros estamos resguardando las salidas en los bloqueos cercanos a la refinería”, indicó la autoridad de YPFB.

Sin embargo el temor de los transportistas se centra con los que ocurre en carreteras y el cerco que hay debido al cerco del sector campesino, quienes además de impedir el paso del transporte chicotean y agreden a los conductores.

Entretanto, YPFB aseguró que repudia toda actitud vandálica de grupos que ponen en riesgo la seguridad de las personas e instalaciones de YPFB, así como de los vecinos de la zona aledaña a la Planta de Almacenaje de Palmasola. No obstante, el proceso penal solo se centra en un vecino que lanzó petardos cerca a las cisternas.

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