Monseñor Gualberti hace un llamado a usar la conciencia para actuar con dignidad y rectitud

“Todos tenemos una conciencia, un corazón que escucha para ejercitar la gran dignidad humana y actuar con rectitud, obrar el bien y evitar el mal, esta conciencia recta presupone la capacidad de escuchar la voz de la verdad en un mundo de tantas mentiras y ser dóciles a sus indicaciones”, indicó el arzobispo emérito de Santa Cruz, monseñor Sergio Gualberti, durante la homilía dominical.

Gualberti pidió a las personas usar la conciencia para saber diferenciar entre el bien y mal.

“Seamos sabios porque la fuerza del mal está al asecho, busca confundirnos y se oponen a que el reino de Dios se abra camino en el mundo”, manifestó.

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Asimismo, indicó que nuestros gobernantes tienen una mayor responsabilidad y que deben realizar sus tareas escuchando su corazón.

“Las personas llamadas a tareas de Gobierno, tienen una responsabilidad interior y más grande, por eso tienen aún más necesidad de la ayuda de Dios y tener ese corazón que escucha”, aseveró.

Además, recordó que este domingo se celebra la jornada mundial de oración por las víctimas de trata y tráfico de personas.

“Es un crimen muy grave lamentablemente presente en nuestro país. El papa Francisco nos dice que la trata de personas es violencia, una herida profunda en el cuerpo de la humanidad a nivel mundial”, indicó.

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Gualberti hizo un pedido para que todos nos unamos en contra de este crimen que asecha a nivel mundial.

“No solamente esas víctimas, todos debemos luchar juntos contra este delito, cuyas víctimas son prioritariamente mujeres, niños y adolescentes para que los derechos humanos se expresen de forma específica en el respeto y reconocimiento de la dignidad de toda persona”, agregó.