No capturar a Marset pese a tener información previa será un “fracaso” para el Gobierno, advierte criminólogo

Sebastián Marset está prófugo hace 10 días y una de las hipótesis es que ya no se encuentra en territorio boliviano. El analista y criminólogo Christian Sánchez afirma que “mientras más días pasen, será más difícil hallarlo”.

En su criterio, una posible fuga a otra nación representará un fracaso para el Gobierno boliviano tomando en cuenta que la información llegó mucho antes del operativo del 29 de julio, cuando Marset dejó la lujosa casa de Santa Cruz de la Sierra para evadir a la Justicia boliviana, donde enfrenta cinco procesos.

“Mientras más días pasen, más tiempo pase, es más difícil, más imprecisa la ubicación, es más difícil hallarlo, porque sus redes también se aseguran, y su propia protección pues se reestructura”, afirma el experto en investigación criminal.

Sánchez insistió en que “si eventualmente este sujeto no es capturado, finalmente va a considerarse, yo creo, un fracaso para el Estado boliviano en relación a sus pares que en su momento han transmitido información precisa sobre su paradero”.

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El Gobierno boliviano envió emisarios a Paraguay, Uruguay y Brasil con el fin de coordinar acciones para capturar al narco uruguayo, pero también para establecer su posible ubicación.

Tras una reunión con autoridades del gobierno brasileño, el viceministro de Seguridad Ciudadana, Roberto Ríos, reveló que una de las hipótesis da cuenta que Marset está fuera de territorio boliviano.

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“Ahora, lo que eventualmente puede ocurrir es que se desestructure la organización criminal en Bolivia, pero esto va a ser finalmente un premio de segundo nivel a la propia captura del señor”, señaló Sánchez.

En este sentido, el especialista indicó que se deberá establecer “en qué medida pues el Estado es responsable de no haber percibido o detectado esta situación”.

“Finalmente tuvo que suceder que alguna autoridad paraguaya y o uruguaya transmitan la información a las autoridades del Estado boliviano para finalmente darse cuenta de que este sujeto estaba en Bolivia, o sea, de mutuo propio el Estado boliviano no percibió, no captó, no detectó esta situación y es altamente llamativo por lo demás”, sostuvo.

Señuelos

En su huida, Marset fue dejando vehículos de alta gama botados, cientos de miles de dólares en departamentos y un video. ¿Había una función para este patrón de fuga?, le preguntó la red UNITEL al experto.

“Suele suceder que estos señuelos hacen que las autoridades de justicia criminal se desvíen, se concentren en un lugar para producir la fuga o el aseguramiento de la persona en otro lugar”, respondió.

Sánchez dijo que a las organizaciones transnacionales hay que identificarlas como “una empresa criminal con una estructura criminal transnacional” como sucede con el PCC, el Comando Vermelho, el Cartel de Cali o los carteles mexicanos.

“Hay un líder, reglas de disciplina y control, una vocación de permanencia en el tiempo, la vocación de cometer delitos vinculados al narcotráfico, la legitimación de ganancias ilícitas y delitos conexos, además que mucha estructura criminal para eventualmente corromper, solapar las actividades criminales y atormentar a la gente, a la población”, sostuvo.

“Entonces, cuando hablamos de esto, precisamente estamos diciendo que la estructura criminal donde ha operado o tiene su influencia, hablamos de Uruguay, Paraguay, Brasil, Bolivia y eventualmente Colombia, pues tiene líneas de seguridad seguramente para los líderes”, añadió.