El camión robado en Chile ya está en Oruro y las autoridades alistan su devolución
El camión y el auto que fue atacado en Challapata en el que se movilizaban los chilenos, fueron escoltados por más de 10 camionetas policiales con decenas de efectivos
A las 23:00 de este domingo llegó hasta Oruro el camión robado en Chile y el vehículo que fue emboscado en la localidad de Challapata en medio de una balacera y que dejó como saldo un extranjero herido, que puede quedar parapléjico.
Los agentes de la Policía trasladaron los motorizados hasta un campo deportivo y una estación policial de esa capital.
Ambos vehículos fueron escoltados por más de 10 camionetas policiales con decenas de efectivos. En el operativo lograron recuperar el camión completo: la cabina y la carrocería.
En tanto, Mario Bello Marañao, el chileno herido durante la emboscada sigue internado en una unidad de terapia intensiva de la capital orureña, cuyos médicos advirtieron que no volverá a caminar.
La familia pide que lo trasladen hasta Chile para recibir una segunda valoración médica tras cuestionar la calidad de los servicios médicos del hospital San Juan de Dios.
Según la Policía, ya se identificó a los dos responsables de este caso, pero además dio cuenta de unos 14 investigados.
El camión fue robado el 27 de junio en Calama, Chile. Tras el hecho, los propietarios se enteran que fue internado a Bolivia, a la localidad de Challapata, y deciden recuperarlo por su propia cuenta. Dos hombres fueron los responsables de esa tarea.
En ese ínterin, Mario Bello Marañao recibió dos impactos de bala en la espalda, lo que afectó a su columna. La familia del ciudadano chileno pide justicia.
Su acompañante, Luis Alfredo Anza Achu, logró escapar del ataque armado y buscaba regresar a su país.
“Mi papá, en este momento, lo que nos han dicho los médicos, es que quedará parapléjico”, señaló María José Bello.
Ambos países analizan los procedimientos para el traslado del herido y la devolución de los motorizados.
Se prevé trasladar los rodados hasta la localidad de Pisiga, en la frontera con Chile, para cumplir con ese procedimiento.