Santa Cruz pone al Censo como eje de su futuro y decide ir al paro indefinido si Arce no lo ejecuta en 2023

Si el Gobierno de Luis Arce Catacora no emite un decreto que establezca que el Censo de Población y Vivienda se llevará adelante en 2023, desde el 22 de octubre del presente año habrá paro indefinido en Santa Cruz. Así se resume la principal conclusión del Cabildo departamental de emergencia por el Censo, que estuvo encabezado entidades entre las que resaltan el Comité pro Santa Cruz y la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm).

Las demandas latentes expuestas por una decena de oradores, recogidas también en el discurso central del presidente del Comité pro Santa Cruz, Rómulo Calvo, tienen un común denominador: Santa Cruz necesita los datos reales de su crecimiento poblacional para enfrentar su futuro: hospitales, seguridad ciudadana, justicia, padrón electoral, representación política, pacto fiscal, redistribución de recursos económicos, todo está ligado al proceso censal.

LA DEMANDA POR EL CENSO Y EL ANUNCIO DE PARO INDEFINIDO

“Nosotros como bolivianos no descansaremos hasta que usted señor Arce Catacora salga a la palestra a dar fecha definitiva para la realización del censo durante el año 2023”, expresó el presidente cívico.

El cabildo respondió con un Sí a dos preguntas:

1. Solicitar y exigir al Órgano Ejecutivo Nacional la realización del Censo Nacional de Población y Vivienda (CNPV) en el mes de junio del año 2023 para que los resultados estén en un tiempo no mayor a los 120 días calendario y sus resultados se ejecuten para que se realice un nuevo padrón de cara a las elecciones de 2025

2. Ir a un paro indefinido a partir del 22 de octubre en caso de que el Gobierno en el plazo de 21 días calendario no cumpla con la convocatoria al Censo en 2023, misma que debe plasmarse en un decreto que debe estar publicado en la Gaceta oficial del Estado.

“Ya no valen las inútiles mesas técnicas, lo que prima es que usted (Luis Arce Catacora) cumpla con su deber. El censo es nuestro derecho y exigirlo es nuestro deber”, matizó Calvo, en medio de las arengas de la ciudadanía.

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El plazo dado al Gobierno es de 21 días y en medio de ese lapso hay dos fechas centrales: el 6 de octubre, cuando las autoridades nacionales inicien mesas técnicas con el sector privado, y el 11 de octubre, fecha fijada por el Ministerio de Planificación para abordar técnicamente el Censo con la institucionalidad cruceña.

EL CENSO COMO PASO NECESARIO

El presidente cívico también sacó a relucir que el Censo dará paso a tener un nuevo padrón electoral, “sin vicios y limpio”, porque partirá de un número real y actualizado de los habitantes por municipio.

Como segunda problemática, el dirigente sostuvo que con el Censo se ratifica el clamor de tener mayor número de fiscales y jueces para Santa Cruz, y demostrará que el número de policías es insuficiente, problemática que se refiere a la justicia y seguridad ciudadana.

La realización del censo también permitirá tener recursos para la masa poblacional que migra de una región a otra, así como conocer las zonas “mas deprimidas de Bolivia” y así generar nuevas políticas públicas para el desarrollo.

“Reclamamos también por una justicia sin partidos, ni colores. Una justicia imparcial, proba, correcta y sin presos políticos. Una justicia sin encubrimiento al narcotráfico y la corrupción, ya que ahora son serviles a los partidos políticos”, apuntó Calvo como cuarto punto.

La problemática de los avasallamientos y el daño a la biodiversidad generado, principalmente, por los incendios forestales también es otro tema pendiente, mismo que fue expuesto también por el cívico provincial José Ernesto Serrate.

LA PALABRA DE LOS ORADORES

Otros oradores también manifestaron la necesidad de más recursos para el sector salud y la parte educativa, así como nuevas fuentes de empleo y recursos, mismos que pasan a formar parte de un conglomerado de temas que se resumen dentro de las demandas del Cabildo.

Fueron cerca de cuatro horas de cabildo, en la que cerca de una veintena de oradores complementó cada uno de los puntos expuestos que también fueron resumidos por Calvo, donde no faltaron las arengas políticas y otros matices relacionados a la religión, la cruceñidad y la unidad entre bolivianos, según las intervenciones.

El gran ausente de la cita fue el alcalde Jhonny Fernández, quien se encuentra fuera del país por un tema de salud. Quien no estuvo en la testera, pero se unió al público presente “como un ciudadano más” fue el gobernador Luis Fernando Camacho, que estuvo acompañado del presidente de la Asamblea Legislativa, Zvonko Matkovic, y parlamentarios de la alianza Creemos.

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