Tuvo una gran campaña de promoción, por eso en todo el mundo y gran parte de Estados Unidos se aguardaba el estreno. Hasta que llegó el 21 de julio. El escenario era el estadio de Fort Laudardale, con los mexicanos como ‘malos de la película’ y entonces apareció Lionel Messi, se convirtió en el salvador con un golazo de tiro libre sobre la hora, se quedó con la gloria y repartió besos a los suyos. Como una típica historia de guionista de Hollywood antes de la huelga, o más bien como un show del cercano Disney World en Orlando, así fue el estreno de ‘La Pulga’ en filas del Inter de Miami CF.
‘Messi Mágico’, ‘Debut soñado’, ‘Is not human’, son algunas de las frases con las que portadas de diarios y memes resumen el debut de Lionel con la casaca rosada. Fue el protagonista del 2-1 sobre Cruz Azul en partido por la ‘Copa de Ligas’ de la CONCACAF, primera presentación desde que el argentino optó por recalar en la Major League Soccer (MLS) de Estados Unidos para desarrollar sus últimas andaduras de una carrera exitosa, que lo ha consagrado como uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos.
Genio y figura en filas del Barcelona, el ‘10’ nacido en Argentina y que creció como futbolista y persona en tierras catalanas, ha sido entre 2004 y 2021 lo mejor que le ha regalado el fútbol a los ojos de los aficionados, un digno sucesor de las épicas y triunfales eras que tuvieron sus predecesores Edson Arantes do Nascimento ‘Pelé’ entre los años ‘60 y ‘70, y Diego Armando Maradona entre los ‘80 y ‘90.
Messi, aún sin sucesor a la vista, estuvo las dos últimas temporadas en filas del Paris Saint Germain con el que logró reinar en el fútbol francés más ya no en Europa, a la que se debe reconocer nomás el mejor nivel mundial a nivel de clubes. En una brutal confesión, admitió que no fue feliz en el vecindario de la Torre Eiffel, en especial porque tuvo que ser testigo de la falta de adaptación de su familia al nuevo entorno.
Messi eligió la MLS, pero principalmente la ciudad de Miami, para tener un cierre de carrera con menos presiones dentro y fuera de la cancha. En la Florida tiene playas y otras distracciones a mano, tampoco hace falta aprender el idioma del país porque el castellano reina entre los millones de latinoamericanos asentados en esa parte de los Estados Unidos, incluida una gran colonia conformada por emigrantes rioplatenses. Y cuando salga a jugar de visitante, seguramente podrá entrar a una hamburguesería de Chicago o un KFC en Kentucky sin que lo acosen por un autógrafo.
En la cancha, su talento le alcanza todavía para hacer magia, no importa mucho quienes sean los otros 10 acompañantes, así apelliden Busquets o Suárez. Ya tuvo debut con gol y victoria, para felicidad del copropietario del club, el exastro inglés David Beckham, festejo de los hermanos cubanoamericanos Jorge y José Mas que son los dueños mayoritarios tras haber comprado las acciones a Masayoshi Son y al boliviano Marcelo Claure.
La aventura de la MLS recién comienza, esa liga estadounidense en la que Jaime Moreno y, principalmente, Marco Antonio Etcheverry, se consagraron como ídolos del equipo Washington D.C., con el que lograron títulos y marcas a fines de los ’90 e inicios del nuevo siglo, que les permitieron ingresar a diversas versiones del Salón de la Fama del deporte del país del norte.
Ahora, los tiempos son de Messi. Como si de un taquillero éxito por la pantalla chica se tratara, la primera temporada está en marcha. Próximo capítulo, Atlanta United, el martes 25 de julio. Por Apple Tv.