Las estafas en WhatsApp son un riesgo creciente, aprovechando la confianza y el desconocimiento de muchos usuarios. Estos fraudes se basan en técnicas variadas, desde el smishing y códigos de verificación, hasta estafas de suplantación de identidad, encuestas falsas, fraudes benéficos, y catfishing en el contexto romántico. Para mitigar estos riesgos, se recomienda una serie de prácticas de seguridad:
Desconfianza inicial
Asumir que cualquier desconocido que contacte vía WhatsApp puede ser un estafador. Evitar responder a mensajes inesperados de desconocidos.
Protección de información personal
No compartir información personal ni financiera con desconocidos o en respuesta a solicitudes no verificadas.
Confirmación de autenticidad
Antes de realizar cualquier transferencia de dinero, especialmente a raíz de una solicitud inusual, se debe confirmar la identidad del solicitante, idealmente a través de un contacto directo y personalizado.
1. Códigos de verificación
Nunca compartir códigos de verificación de WhatsApp con nadie. Si alguien afirma haber enviado un código por error, puede solicitar uno nuevo por sí mismo.
2. Cautela con enlaces y correos electrónicos
Evitar abrir enlaces sospechosos y verificar la autenticidad de cualquier correo electrónico o mensaje que parezca provenir de una fuente oficial.
3. Uso de tiendas oficiales para apps
Descargar o actualizar aplicaciones solo a través de tiendas oficiales como Google Play Store o Apple App Store.
4. Verificación en dos pasos
Activar la verificación en dos pasos en WhatsApp y proporcionar una dirección de correo electrónico para recuperar el PIN en caso de olvido.
5. Contraseñas seguras
Establecer contraseñas fuertes y difíciles de adivinar para el correo electrónico y otros servicios sensibles. Por ejemplo, cuentas bancarias.
6. Revisión de dispositivos vinculados
Comprobar regularmente los dispositivos vinculados a la cuenta de WhatsApp y cerrar sesión en aquellos no reconocidos.
7. Control de acceso físico
Asegurarse de que solo personas de confianza tengan acceso físico al teléfono móvil.
En un mundo cada vez más conectado, la seguridad en plataformas de mensajería como WhatsApp es primordial.
La vigilancia constante y el escepticismo saludable son esenciales para proteger la información personal y financiera.
Según el Informe Global de Fraudes y Riesgos 2023, el 65% de las empresas reportaron haber sido víctimas de fraude cibernético, destacando la importancia de la prevención y la educación en esta área.
El engaño del código de WhatsApp enviado por error es una estafa cibernética que busca apoderarse de cuentas de usuarios en esta plataforma. El atacante, tras obtener el número de la víctima, intenta acceder a su cuenta de WhatsApp, lo que genera un SMS con un código de verificación.
El estafador se contacta con la víctima alegando haber enviado ese código por error y solicita que se lo reenvíen. Si la víctima cae en la trampa y comparte el código, el atacante gana acceso a su cuenta de WhatsApp.
Para prevenir ser víctima de este timo, es esencial desconfiar de cualquier mensaje que solicite compartir un código de verificación, incluso si parece provenir de un contacto conocido.
Como afirmó Warren Buffet, ”Se necesita 20 años para construir una reputación y solo cinco minutos para arruinarla”.
Este principio es aplicable en el ámbito digital, donde un solo error o descuido puede tener consecuencias significativas.