Ritual satánico: los aterradores objetos que hallaron dentro del caso del niño desaparecido en septiembre
Continúa la investigación de la Policía y hay avances sobre la desaparición de Maximiliano Tabares Cano, de seis años. El caso estremece a Colombia
Las investigaciones por la desaparición del niño Maximiliano Tabares Cano, en un hecho que estremece a toda Colombia, avanzan y tras operativos se encontraron varios objetos sobre la secta satánica ‘Los Carneros’. Uno de los integrantes de este grupo reveló que el niño tenía un espíritu que poseía su cuerpo.
La Policía y la Fiscalía llegaron hasta una casa en Segovia, Antioquía, donde la tribu satánica llevaba a cabo diferentes actos crueles y de sacrificio. Esta secta está dirigida, según indican, por el padrastro de Maximiliano.
En medio de la investigación se aprehendió a seis personas, la mamá, la abuela, el padrastro y otras tres personas dentro de este caso.
La investigación señala que un ‘Médium’ (persona que dice ser mediador entre espíritus muertos y seres vivos), denominado alias ‘Orejas’, le dijo al padrastro de Maxi que había un problema para ubicar el oro que buscaban en las minas pues “el niño tenía unos espíritus malignos”, por lo que propusieron a su mamá extraerle esas supuestas fuerzas por medio de rituales.
“La forma de extraerle estos espíritus es mediante actividades de tortura, presuntas lesiones, que fueron manifestadas por algunos testigos de la comunidad que las observaron de manera presencial, incluso le preguntaron a la progenitora de dónde se producían estas lesiones y ella manifestaba que el niño se había caído por un barrando en una bicicleta”, informó un investigador policial.
Las torturas habrían sido en la casa de la abuela del menor, y que por los golpes y torturas no lo dejaban ir al colegio desde los primeros días de septiembre.
Un integrante de la tribu satánica ‘Los Carneros’ indicó que “el niño tenía un espíritu que poseía su cuerpo y que se lo debían sacar, ritual al que no asistí. Al día siguiente me enteré de que Maximiliano, hijo de Patricia Caro, estaba desaparecido”.
En la casa del médium los hallazgos fueron de terror, pues debajo de una cama había un muñeco vudú, la silueta de una persona en el cual está demarcada muy claramente lo que eran los ojos, la boca y muy remarcado el corazón”.
Además, encontraron libros y otros químicos con los que realizaban actos satánicos. Maximiliano Tabares no aparece y se esperan más investigaciones para encontrarlo.