El primer encierro de los sanfermines, peligroso al romperse la manada
Pamplona (España), 7 jul (EFE).- El primer encierro de los sanfermines de 2014 ha sido muy peligroso, al romperse la manada en varias tramos del recorrido por las calles de Pamplona (España), en el que al menos un corredor ha resultado herido por asta de toro.
El encierro, protagonizado por la ganadería gaditana de Torrestrella, de divisa azul y oro, ha durado dos minutos y medio, y se ha corrido con cinco toros de lidia, ya que el sexto ha sido retirado al haberse lesionado en una pata.
La carrera empezó sin incidencias y encabezada por los cabestros, con los que los toros han enfilado la cuesta de Santo Domingo, donde el astado "Frutero" ha corneado a un mozo en un muslo.
A pesar de este percance, la torada ha seguido la carrera y ha cruzado de manera rápida y limpia la plaza Consistorial y la calle Mercaderes, hasta llegar a la curva con Estafeta, donde uno de los bureles ha resbalado y caído al suelo.
En este punto, la manada se ha roto y se ha dividido, lo que ha permitido a los corredores intercalarse entre los toros, que aún se han separado más al caerse un segundo animal en la misma calle Estafeta.
Separada la manada en tres grupos, se ha visto tanto en esta calle como en el tramo de Telefónica distintas caídas, aunque las reses han seguido su carrera hasta la plaza, en cuyo callejón ha caído otro toro, lo que ha provocado instantes de incertidumbre.
El servicio de urgencias del Complejo Hospitalario de Navarra ha informado tras el encierro de que al centro han sido trasladadas cinco personas, una de ellas la herida por asta de toro.
Los de Torrestrella serán lidiados a las 18.30 horas (16.30 GMT) en el coso pamplonés por los diestros Antonio Ferrera, Miguel Abellán y David Mora.
Pamplona empezó ayer sus fiestas tradicionales, los Sanfermines, una cita conocida mundialmente e identificada con los conceptos de diversión, multitudes y toros, ya que los encierros de los astados son el principal foco de atención hasta el próximo día 14.
A mediodía, desde el balcón central del ayuntamiento de Pamplona (norte), el máximo responsable de la Cruz Roja en la ciudad lanzó el cohete que marca el inicio de ocho días de fiestas.
La elección del lanzador del "chupinazo" se debe a que la Cruz Roja cumple este año un siglo y medio de actividad en España y el ayuntamiento pamplonés ha querido rendir homenaje a la organización humanitaria.
Los sanfermines de este año contarán con 443 actos, programados por el Ayuntamiento de Pamplona, que destina cerca de un millón de euros a los festejos.