“No estamos mal, pero podemos estar mejor”, afirma Arce sobre la economía boliviana
La postura del mandatario boliviano se registra luego que analistas y legisladores de oposición advirtieran que Bolivia está al borde de una crisis debido a varios factores, entre ellos la reducción de las reservas internacionales
El presidente Luis Arce afirmó este jueves que la economía boliviana “no está mal”, aunque admitió que “podemos estar mejor”. En ese marco, ratificó que la subvención de los hidrocarburos se mantiene y se impulsa la industrialización para sustituir las importaciones.
La postura del mandatario boliviano se registra luego que analistas y legisladores de oposición advirtieran que Bolivia está al borde de una crisis debido a varios factores, entre ellos la reducción de las reservas internacionales.
“Los ajustes pueden venir por el lado de los precios o de la cantidad de la producción, es lo que plantea siempre el Fondo Monetario Internacional (FMI), el ajustes de los precios es muy fácil y trae enormes consecuencias para la gente”, sostuvo Arce.
En criterio del mandatario, estas versiones tienen un tinte político.
“Lo más difícil siempre es ajustar la economía por el lado de la cantidad de producción”, añadió tras destacar que este plan se enmarca en una “solución estructural” como es la industrialización.
En ese marco, precisó que las inversiones estatales “apuntan al sector agropecuario”, aunque precisó que los resultados se verán en los próximos años.
”Estamos decepcionando la tendencia negativa de los organismos internacionales”, afirmó Arce tras destacar que a octubre el Producto Interno Bruto (PIB) se expandió en 2,2%. Citó como ejemplo la proyección del Banco Mundial que se cifra en 1,3%.
Luego destacó la reducción de los índices de desempleo y sentenció: “Estos indicadores hablan de lo contrario, no estamos mal. Podemos estar mejor, sin duda alguna y en eso estamos trabajando”
No obstante, advirtió que el complejo escenario económico internacional “se puede complicar más todavía”.
Según Arce, el plan de industrialización impulsará la economía y la reducción de la subvención de los hidrocarburos.