Madrid, 13 sep (EFE).- Keylor Navas, portero costarricense del Real Madrid, encadenó ante el Espanyol su tercer partido consecutivo sin recibir un gol y alcanzó un registro de la temporada 1975/76, en la que el guardameta Miguel Ángel González mantuvo a cero su portería en las tres primeras jornadas de Liga.
Han pasado cuarenta años de aquella marca que Miguel Ángel alargó hasta un cuarto partido. En total, estuvo 360 minutos sin recibir un gol y Keylor Navas podría alcanzar esa cifra el próximo sábado cuando se enfrente al Granada en el estadio Santiago Bernabéu.
El entrenador Rafael Benítez, obsesionado por mantener el equilibrio entre la zona de ataque y la defensa, puede estar contento. De momento, sus jugadores están cumpliendo a la hora de proteger una portería que, en las 39 temporadas anteriores siempre había recibido goles en los tres primeros partidos del torneo.
En alguna ocasión el Real Madrid estuvo a punto de conseguir dejar la portería imbatida, pero porteros como Iker Casillas (2010/11 y 2006/07), Santiago Cañizares (1997/1998), Pedro Jaro (1992/93) y Paco Buyo (1991/1992 y 1987/1988), recibieron un tanto en los primeros compases del campeonato. Hasta este sábado, esos fueron los mejores registros en cuarenta años.
Por eso, Benítez, aunque después de golear 0-6 al Espanyol declaró que su equipo aún tiene "detalles" que mejorar, roza la felicidad. La perfección sería absoluta si sus hombres hubieran ganado al Sporting en la primera jornada, en la que firmaron un 0-0 en el estadio de El Molinón. Después, el 5-0 al Betis y el 0-6 al Espanyol dieron la vuelta al primer pinchazo del año.
El técnico madrileño no descuida el ataque del Real Madrid que ayer Cristiano Ronaldo engrandeció con sus cinco dianas. Pero Benítez siempre echa la vista atrás a la portería:
"Desde mi presentación dije que iba a ser un Madrid ofensivo, que marcara goles. Es lo que estamos trabajando, aunque tratamos de conseguir un equilibrio (en defensa), siempre sin perder de vista para nada la portería contraria. En la segunda parte teníamos que defender bien para echar una mano a Keylor y mantener el récord", dijo orgulloso en la sala de prensa del estadio Cornellà-El Prat.
Ese récord de Miguel Ángel que parecía inamovible lo ha igualado un guardameta que estaba destinado a jugar en Inglaterra esta temporada. David De Gea fue el elegido por el club blanco para defender la portería y Keylor el señalado para dejar su hueco al español.
Sin embargo, el traspaso fallido y rocambolesco de David De Gea al Manchester United dio una oportunidad a Keylor Navas, que desde que llegó al Real Madrid nunca ha podido demostrar las cualidades que le engrandecieron en el Levante y con Costa Rica en el Mundial de Brasil 2014.
Keylor se ha repuesto perfectamente al sofoco del último día del cierre de mercado. Metódico en el día a día para trabajar, el costarricense es ahora una figura muy importante para Rafael Benítez, que desde el lío de David De Gea siempre ha asegurado mantener una relación perfecta con su portero titular.
Todo el ruido que generó aquel caso no ha afectado a Keylor, que simplemente se ha dedicado a despejar balones. En total, ha hecho once paradas en los tres partidos que ha disputado. Detuvo un penalti al Betis y ha firmado actuaciones sobrias con apariciones de mucho mérito.
"Todo el equipo ha hecho un gran trabajo y sale con una sensación positiva de este partido. Queremos que la defensa sea uno de los puntos fuertes de este año y lo estamos consiguiendo. Me siento con confianza, tranquilo y con ganas de trabajar". Esas son las palabras de un hombre que nunca alardea cuando cumple con creces.
Y es que Keylor Navas ya no es una incógnita. Por fin puede ser feliz en el Real Madrid. No existe la sombra de Iker Casillas. Tampoco la de David De Gea. Solo tiene detrás el aliento de Rafael Benítez y a un compañero al que ha superado, Kiko Casilla. Sus números delatan su buen momento. Y es que echar el cerrojo en la portería del Real Madrid no es fácil. Navas, de momento, lo ha conseguido.