La leyenda del día en que la reina Victoria sentenció: “Bolivia no existe”
La muerte de Isabel II ha recordado a muchos una famosa historia que ronda desde el siglo XIX sobre el día en que Melgarejo enfureció a la monarquía británica. ¿Es verdad que sucedió esto?
La relación entre la realeza británica y Bolivia fue muy poca a lo largo de la historia si se la compara con la corona española, cuyos miembros visitaron su excolonia durante varias veces.
Uno de los hechos que relaciona a Bolivia con el Reino Unido data del siglo XIX, en tiempos en los que gobernaba el dictador Mariano Melgarejo, uno de los personajes más siniestros de la historia boliviana.
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Esta leyenda, que forma parte del imaginario popular y cuya certeza nunca se ha comprobado, ha sido reflejado a lo largo de los años por diarios españoles como El País y ABC y contada en uno de sus libros por el fallecido escritor uruguayo Eduardo Galeano.
Galeano relata: “Cuentan que el dictador Mariano Melgarejo obligó al embajador de Inglaterra a beber un barril entero de chocolate, en castigo por haber despreciado un vaso de chincha. El embajador fue paseado en burro, montado al revés, por la calle principal de La Paz. Y fue devuelto a Londres. Dicen que entonces la reina Victoria, enfurecida, pidió un mapa de América del Sur, dibujó una cruz de tiza sobre Bolivia y sentenció: ‘Bolivia no existe’”.
El diario El País de Madrid cuenta en una columna de opinión escrita en 1985 que la reina Victoria, tras enterarse de la agresión que había sufrido su embajador contempló “una expedición de castigo” para vengar la afrenta, pero que tras ubicar a Bolivia en el mapa y evaluar “las dificultades y el costo” de la misión la descartó por completo, sentenciando luego la famosa frase.
¿La historia es verdadera? Según cuenta un libro del diplomático e historiador Roberto Querejazu Calvo (+) se trata de una simple leyenda que se hizo popular en la época luego de que existieran inconvenientes entre el entonces encargado de negocios británico, coronel John Augustus Lloyd y el gobierno de Bolivia.
La historia oficial sitúa este conflicto no con Melgarejo sino con su antecesor Manuel Isidoro Belzu que respondió de forma agresiva a una exigencia de la empresa británica Hogan para que se la indemnice por la expropiación de una rescatadora de barrillas de cobre en Corocoro. Las rencillas dieron origen luego a la famosa leyenda, que aún muchos dan por cierta.